Objetivo de Aprendizaje
Identifica la importancia de una actuación ética en el ejercicio policial, fundamentando su labor en prácticas que favorezcan un contacto profesional con la comunidad. Ello facilita el cumplimiento de su misión, en apego a los lineamientos jurídicos establecidos por la ley que rige su desempeño como elemento de seguridad pública.
Introducción
Esta asignatura es parte fundamental dentro de la formación de los elementos de las corporaciones de policía, ya que es prácticamente imposible el conciliar de una manera efectiva la función de la policía con los ciudadanos sin que en la mayoría de las ocasiones estén en desacuerdo con la forma de actuar. La ingrata función que los agentes del orden tienen que llevar a cabo, en la mayoría de los casos, no es comprendida por los ciudadanos que solo ven que son perjudicados por su función.
Rápidamente olvidan cuando la policía ayuda y facilita su vida, raro es encontrar que alguien se encuentra satisfecho. Aunque el balance de su relación con los funcionarios policiales se refleje en un número mayor de intervenciones satisfactorias para la ciudadanía, siempre, una sola actuación que reprima alguna infracción cometida por él inclina la balanza en contra.
Por todo ello, la actuación policial debe ser rigurosa y conforme a unos comportamientos éticos en los que el funcionario debe estar bien adiestrado.
La ética policial que debe imperar no debe ser algo autoritario que no evolucione con la sociedad.
Cuando en la sociedad encontramos un problema, éste requiere soluciones desde un punto de vista humano.
Es innegable que los funcionarios policiales no pueden ser neutrales dado que, como personas, tienen sus propias escalas de valores, otra cosa es que se les exija esa imparcialidad en el ejercicio de su función.
Esta exigencia comporta una preparación y una vocación que el funcionario debe adiestrar y aplicar, y no siempre se consigue, es por esto que se requiere un código de Ética para ajustar unos valores mínimos y conocer la definición mínima de los conceptos.
ÉTICA: es la ciencia que se encarga del estudio de la conducta.
POLICÍA: son los cuerpos encargados de velar por el ordenamiento y la seguridad de los ciudadanos
ÉTICA POLICIAL: se ocupa de las normas de la conducta de los cuerpos encargados de velar por el mantenimiento del orden público.
INTEGRIDAD: todos los elementos están unidos y deben trabajar en conjunto actuando de igual forma, de manera imparcial; para poder ser un elemento digno de portar el uniforme para servir a la nación.
ORDEN: instrucciones que se le da a un elemento, son impartidas por un superior hacia sus subalternos. Obedeciéndolo con respeto siempre y cuando no vaya en contra de la ley.
El deber de un policía es evitar y prevenir la violación de las leyes, portar adecuadamente el uniforme y actuar sin dilación alguna protegiendo a los conciudadanos, contra la violencia, robos y otros actos predatorios.
CONFIABILIDAD: es una actitud que por medio de tus conocimientos sobre cierta situación te permite confiar en ti mismo, y así, poder confiar en las personas y viceversa.
LEGALIDAD: es hacer las cosas de una manera correcta o llevar a cabo acciones respetando las leyes.
EFICIENCIA: es hacer las cosas de una manera correcta y presentarlas en tiempo y forma.
HONRADEZ: aceptar y reconocer tus bienes materiales y no actuar fuera de la ley para obtener gratificaciones extras por una acción indebida.
PROFESIONALISMO: actuar en el cumplimiento de tu deber, sin dilación alguna y efectuar tus acciones de manera adecuada respetando las leyes sin excluir ni discriminar a nadie.
RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS: no violentar las leyes. Fomentar y difundir el respeto hacia las personas.
También es importante que el policía sepa ejercer esa autoridad de un modo razonable y de acuerdo con unos principios éticos. Esto ayudará a que ese ejercicio se mueva en unos niveles de comprensión mejores y, lo que es más importante, a que sea entendido por el ciudadano como justos.
Se debe pensar antes de actuar en cada caso concreto y no limitarse cómodamente a la resolución del problema.
El modo de actuar que se propone alineado al programa rector del SESNSP requiere utilizar una ética aplicada para que nos oriente a desempeñar una función más justa y adaptada a las exigencias del momento y de la sociedad.
Todas estas reflexiones nacen de las inquietudes que surgen a la hora de ejercer una función apasionante, y a la vez complicada, como es la función policial. Función que, a través de los tiempos, evoluciona pareja a la sociedad.
Así es como se presenta esta asignatura, la cual integra cinco unidades:
Unidad 1. Misión de la policía.
Unidad 2. El policía como agente y referente social.
Unidad 3. Marco jurídico y operacional.
Unidad 4. Ética policial.
Unidad 5. Buenas prácticas policiales.
En estas unidades se brindará al elemento de las instituciones policiales herramientas teórico-prácticas para aplicar la Ética Policial y Responsabilidades en su vida laboral diaria.